El Tirol-Viaje por Centro Europa

  • Durante todo el viaje que acabamos de terminar, he ido subiendo algunos videos a las Redes Sociales que iba titulando «Europa, Pinceladas ….» y es que me costaba poder trasmitir lo que deseaba con los videos o fotos tomadas. Sin duda, estas experiencias están tan cargadas de vida, emociones, vivencias, risas, contratiempos, alegrías, algún enfado que otro y tantas y tantas situaciones que, reflejar esto en un video es difícil, y si ademas todo estos calificativos van  acompañados de paisajes y entornos para que te explote la cabeza, pues como comprenderéis, lo hace todo mucho mas difícil. 
  • La historia comienza en Sagunto, aunque antes veamos cómo llevábamos la furgoneta de apoyo con las maletas y los picnic.
Pues iba como tenia que ir. A tope como no podía ser de otra manera.
  • Sin duda, nuestro gran apoyo para que todos puedan disponer de su ropa sin la limitación de espacio que nos obliga la moto. 

Como decía, Sagunto, punto de encuentro de todos los participantes, 16 personas, mi socio Andres y yo. Las cartas estaban echadas y la partida comenzaba. El reto, sin duda no iba a ser fácil. Porque aunque vaya todo muy preparado, los inconvenientes, las sorpresas y lo inesperado siempre estarán ahí para hacer su aparición cuando menos lo esperas. 

Día de encuentro y día para que se conocieran aquellos que hasta entonces eran desconocidos.

Y ya que seguimos en España, nos fuimos a cenar a un chiringuito de playa, como mandan los cánones. Había tiempo por delante para echar de menos un chiringuito, asi que allí fuimos a por nuestro pescaito frito.

El nerviosismo estaba servido, ya que nos invadía las ganas de llegar ahí arriba, a EUROPA, madre mía. Para algunos era muy especial ya que era la primera vez, y para otros como si lo fuera… llevamos mucho tiempo encerrados con esto de la pandemia….asi que imaginen. Nos faltaban kms y nos sobraba ansiedad….pero todo estaba por venir.

Ya subiendo dirección Perpiñan hicimos nuestro primer picnic. El cachondeo no se puede describir, pero estuvo muy bien, ya que llevábamos un buen arsenal de materia prima de primera calidad, gracias a nuestros amigo Luis, Jorge y Montse. Asi que lo único que había que hacer, es sacar mesa, y llenarla de manjares …

Una pequeña muestra de cómo nos pusimos….

Nuestra historia continua, motos y coches, coordinados seguimos nuestro ascenso dirección Suiza. Los bellos paisajes y los verdes prados estaban por llegar….Es preciosa la sensación cuando empiezas a escalar Los Alpes, Mont Blac , allá vamos…

En algún lugar de Suiza

Nuestro objetivo, llegar a Grenoble, enclave estratégico en la antigüedad, ciudad dominada por La Bastilla y que hoy día es uno de sus atractivos mas interesantes junto a su casco antiguo, que proviene del S.XVIII, y que sin duda te encantara pasear por sus calles. Al anochecer, unas buena Fundue de queso nos hizo temblar.

A medio día hicimos escala en Vizille, Para visitar el Palacio del Vizille, jardines y museo importantísimos en la cultura francesa, ya que se ubica en este lugar, el museo mas dedicado a Napoleon y a la revolución francesa. Sin suda un imprescindible si pasas por estos lugares.

Cenando en uno de nuestros restaurantes seleccionados. Mira la Fondue como goza al derretirse…el olor hizo que una de nuestras «moteras» tuviese que salir del restaurante de la intensidad del olor. Tremendo.

Esta vista es desde uno de los miradores de la Bastilla, sin duda su tranquilidad y la visión que se puede contemplar es un pago mas que justo para lo que vale el telesilla para llegar. Se puede hacer en coche también, aunque te deja un poco lejos, y si no quieres andar, esta es la mejor opción.

«Las curvas iban y venían, El verde intenso se combina hábilmente con el verde claro, las casas y los pueblos parecen ordenados y puestos a posta por una Dios organizado, mientras tanto seguimos subiendo metros. La meta, Chamonix, una de las grandes ciudades a pie del Mont Blac. No es la primera vez que pasamos por alli. Ciudad turística, preparada para las estaciones de invierno y muy bien acondicionadas para las épocas de verano. Sin duda una gran delicia para el disfrute turístico. No os perdáis subir en el teleférico hasta las grandes cumbres con sus nieves perpetuas.»

Este dia, llegamos a Verbier. Ummmmmm, cuando lo recuerdo es como que me sabe al colores, prados y montañas, verde, bacas y madera, hotel precioso, piscina, lluvia, olores muy emotivos…. intentar explicar todo esto es difícil, y si no llegas a este puerto de montaña escondido en el Valle de Bagnes a mas de 1500 m de altura conduciendo una moto, pues no me entenderás….lo siento.

Cenamos en un pequeño restauran a unos 200 metros mas de altura, que a día de hoy me sigo preguntando cómo accederán aquí cuando este nevado….

Este día, fue uno de esos que queríamos que lloviese , pero solo un poco. nos perdimos muchos paisajes y por este inconveniente, y como estábamos tan altos las nubes las tocábamos, mi moto, iba entre algodones «literalmente»….

…pero ya sabéis…no nos importa que llueva en una buena moto 🙂

Os dejo algunas fotos mas de este día:

Foto de inzq. y derc, son las vistas desde la ventana donde cenamos.

Este el es hotel.

Un nuevo día llegaba y otra gran aventura se presentaba ante nosotros. Hoy había sorpresa, ya que montábamos en un tren, y eso de subir las motos en un tren, como que era la primera vez para muchos. En ferry’s si que hemos subido anteriormente, pero en tren no es tan común, y es que para atravesar una cadena montañosa compleja, era la mejor de las opciones, la otra alternativa era atravesar dicha cordillera por carretera muy estrecha y algo peligrosa y mas para un convoy tan largo como el nuestro. Os recuerdo que éramos 7 motos, 2 coches y el furgón de apoyo….nada de nada…

Intervalos lluviosos pero constantes e intensos, esto nos estropeo mucho el día, porque el devenir de paisajes era como poco igual al día anterior, y aunque se nos afeo un poco, lo disfrutamos muchísimo todo el grupo.

Una parada estratégica a calentar cuerpos con café y con lo que pillo cada uno, algunos con buena cerveza.

Este nos hizo lo honores y pito a nuestro paso…

Mira !! Mira!!! pero qué bonito por Dios.

Izquierda, la cabina donde íbamos con las motos, la liamos parda.

Lugar donde iban los vehículos, debajo de estas ruedas, casi los railes del tren…

Y así y con algunos fotos más en el camino, seguimos y seguimos navegando hacia nuestro destino. Davos, es verdad que llegamos tarde y no pudimos disfrutar el bonito hotel que teníamos allí, pero fue el peaje por tener como compañera a esa lluvia que hizo un fiel seguimiento todo el camino.

Al final del día, una buena cena y nos contamos las anécdotas del día. Esto marchaba, y la lluvia nos ha hecho prometer que volveremos!!!!!

Ya nos tocaba bajar de las montañas para buscar nuestro próximo objetivo. Nuestra compañera de viaje, El Rodano, que nos acompañó hasta llegar a Salzburgo. El tramo era espectacular como no podía ser de otra manera. Nos introducíamos en otro país, Austria, y se nos abría ante nosotros «El Tirol» mas occidental. El paisaje cambió, la carretera también hizo lo propio y el tiempo nos concedió una tregua que bien hubiera pactado el día anterior. Salimos de una entorno para entrar a otro que como mínimo es igual de hermoso. Las casas parecían sacadas de dibujos animados ya que los contrastes de colores propiciaban a que esto ocurriera. Recuerdo mirar por el retrovisor a mis compañeros y ver como ellos y sus parejas movían las cabeza a lado y lado…. jajaja se nos partiría el cuello a ese ritmo.

Llegamos a almorzar a un bonito pueblo llamado Alpbach. Un buen almuerzo seguido de un paseo fueron los aperitivos del día. Aunque quedaba camino y día por recorrer.

Ya en Salzburgo, tocaba lo propio, paseo por los jardines del Palacio de Mirabell, fotos de grupo, charlas y paseo fueron la constante hasta que llegamos al casco antiguo buscando donde teníamos el restaurante para la cena. Hoy tocaba una taberna típica austriaca, buena cerveza y comida lugareña para acabar un gran día. Aunque aun nos debía el día una sorpresa, ya que al salir de cenar nos cayo uno de los diluvios mas grandes jamas contados, llegamos empapados al hotel, yo me resfrié.

Esta foto de grupo la hicimos en los jardines anteriormente mencionados.

«paseando por las calles» los jardines

Qué momento de paz durante la cena, verdad ?. El día se ha cumplido, los objetivos alcanzados o al menos la mayoría, la tensión la dejas caer, y esa cerveza entra como agua de mayo…

Pero, un nuevo día viene y este había que aprovecharla. Hoy hacíamos un recorrido por Tirol central, así que los pueblos de ensueño, los paisajes y lagos estaban por aparecer uno de tras de otro.

El recorrido iba desde Salzburgo hacia Hallstatt, pasando por Sankt Gilgen, luego íbamos a subir por Gmunden. Algunas cosas nos hicieron acortar el recorrido, pero en definitiva estuvo genial. Aunque nos dejo con ganas de más.

y otro gran día se merecía otra gran cena. Esa noche nos fuimos Augustiner Bräustübl, lugar que recomiendo, mas que por su comida, por el concepto de restaurante. Es un lugar con sus salas y espacios amplios, coges las jarras de cerveza y pasas por diferentes puestos de comida y eliges lo que vas a comer, al gusto y cantidad. Cada puesto tiene su cocinero y tipo de comida particular, luego con tu cerveza pues te ubicas en cualquier salón y a disfrutar de la velada. Curioso y diferente, esa era la idea que queríamos cumplir , así que conseguido.

Las jarras no eran nada despreciables. Y qué buena…..

Aquí hicimos amistad con unos lugareños, y terminamos cantando: «Viva España». Manolo Escobar for ever.

Y levantamos anclas al día sigue y continua nuestro periplo, hoy llegamos a Viena, siempre elegante, bonita y preciosa de visitar. Creo que es mi cuarta vez que visito esta capital europea, y como siempre me resulta una maravilla. Aprovechamos que en agosto se celebra todos los años el festival de música y películas. En la plaza del ayuntamiento se organizan verbenas, multitud de cocina diferente de una calidad suprema, cerveza, y mucho buen rollo por todos sitios. De fondo la fachada del ayuntamiento con proyecciones de música y danza.

Aunque antes de llegar nos paramos a ver el monasterio cristiano más grande de Europa. Abadía de Melk, de construcción barroca del siglo XI, una visita también indispensable si pasas por la zona.

Una visita majestuosa para una viaje majestuoso.

Retomemos la primera noche de Viena. Al terminar aquí, tomamos nuestro picnic, cobijados con las sombras de la arboleda, y continuamos camino hacia la capital. Acomodación, ducha y prestos para descubrir Viena. Allá que echamos andar hasta la plaza del ayuntamiento, llevábamos nuestras entradas ya sacadas con verificación de vacunación Covid, así que fue todo rápido. Cogimos sitio y a pedir comida y cervezas, después del festín nos sentamos en las butacas acondicionadas en la plaza para ver la danza y escuchar la música lírica. Fue relajante, mucha paz.

Para el siguiente día teníamos una guía contratada para hacer lo propio por el centro. Información del imperio austriaco mientras recorrer todo el epicentro de la ciudad es la mejor formula para aprender mucho.

Al terminar la visita y depues de haber visto el baile de los caballos de la Escuela internacional Ecuestre Española de Viena, tomamos un tren de cercanías para ir a las afueras de la ciudad, en concreto a Grinzing, al restaurante «Heuriger Zum Berger». No os lo perdáis porque aunque la variedad de comida es poca, pero es de gran cantidad y de mucha calidad, y esta super bonita la terraza y su arboleda. En le video del viaje se muestra.

Por la tarde continuamos con el paseo y algo de descanso. Esa noche para cenar estuvimos en un restaurante donde nos sirvieron un menú de platos salados y otros dulces. Algo diferente para terminar la jornada. El viaje continua.

Nos vamos para Praga, y sin duda otra de esas capitales que siempre van bien. Entramos a la ciudad con todo el convoy por el mismo centro hasta nuestro destino. Un poco casi impresionante, ya que es una de las pocas y grandes ciudades que no están cortadas al trafico en su casco antiguo. Pasear por sus calles y su historia es una delicia. En esta ocasión también teníamos guía para el grupo para disfrutar del paseo por la ciudad, Dos días aquí fueron imprescindibles, el hotel lo teníamos detrás de la plaza del reloj, y en esto ocasión un hotel boutique. Buena comida y buena cerveza, eran el complemento ideal para estos días en Praga.

Si vais por estas tierras no dejes de visitar el castillo, en su interior de alberga una cantidad de historía muy interesante, cada historia que ten cuente del castillo es una aventura del pasado.

Después de estos dos días en Praga, teníamos por delante una jornada más larga que las ultimas contadas. La bajada en dirección España ya tenia que ser una realidad y contundente, así que nos pusimos manos a la obra dirección Titisse, bonito pueblo situado al sur de la «Selva Negra», en Alemania. Este lugar, como ya he mencionado en otro post, es un entorno al cual venir y disfrutar con tiempo. La gran mayoría de sus pueblos esconden una belleza preciosa. Para descubrirlo, hay que ir a verlo.

No llegamos a mala hora al destino, así que tuvimos tiempo de ir a la piscina del hotel, a pasear por el centro turístico, a sentarnos enfrente del lago y a soñar con mas momentos como esos. Sin duda, un pueblo para hacer una parada en el camino imprescindible,

Con estas imágenes , que son pocas pero no puedo poner tantas, seguimos adelante. Or recuerdo que el video final podréis disfrutar de este viaje, de otra forma…

Las cuentas ya estaban mas que echadas, y el tiempo atrás nos anunciaba algo que en el fondo siempre, siempre será una buena noticia, y es que el viaje, va tocando a su fin. Todo iba lo bien lo que podía ir. aunque algunos de nuestros aventureros por alguna u otra razón tuvieron que abandonar la disciplina del viaje antes de llegar a Sagunto todos juntos, pero lo cierto es que todo iba bien. Sin accidentes relevantes, y esto es lo que realmente importa. El objetivo de todos se estaba cumpliendo.

Navegando por algún lugar de Europa

Ese día no iba a ser menos, nuestro penúltimo picnic nos aguardaba en la furgoneta. Asi que paramos en una área de Picnic, que hay que mencionar y que no se me olvide que en ese sentido Francia esta muy bien preparada, repleta de áreas para parar y descansar, con mesas, asientos y arboledas para el viajero.

Ahora nos tocaba llegar a Lyon, ciudad que no conocía y que me agradó enormemente. Con un centro histórico precioso, buenas calles para pasear y verlas en buena compañía, y con una distribución de la ciudad bastante buena. Nos hospedemos en todo el centro, y desde allí, a investigar y una vez más nos llovió otra vez, hicimos lo que tocaba, correr y tener una buena cena.

Jugando en un mini futbolín que había dentro del hotel. Este hotel era una antigua fabrica de hilos, no cuesta imaginársela en los años 20 en esta vieja Francia, una fabrica en mitad de la ciudad mientras Europa intentaba reponerse de la primera guerra mundial. Pero para saber mas, has de viajar y conocer este hotel….

Sin duda, había que seguir bajando, y es que hay que llegar a España y luego a casa. Así que nos faltaba nuestra penúltima parada, en esta ocasión sería Andorra. Y poco que decir y a la vez tanto como de otras tantas ciudades, bien es verdad que es una localidad bien conocida para muchos de los lectores de este bloc. Al llegar, duramos muy poco en el hotel, la gente quería salir a comprar, que como sabéis, es una ciudad propicia para ello sí sabes qué vas a comprar y donde. No caigan en ir a comprar cosas comunes al centro turístico, porque no encontraran grandes diferencias de precios en la gran mayoría de artículos. Y tengan en su cabeza las referencias de precios, porque si no al final y por inducción del propio lugar, creerán que van a comprar barato y en realidad no se están ahorrando prácticamente nada. Ojito.

Así que nos vimos para cenar, en el restaurante 120. Ummm. os lo recomiendo,

Una vez más, se nos va otro día, paseo nocturno para bajar toda la ingesta, y al hotel. Nos queda un penúltimo salto. Y lo cierto es que cuando llegas a estas alturas, te surgen sentimientos contrapuestos, porque hay ganas de llegar a casa, como no, pero la costumbre de estos nuevos día a día, el convivir con el grupo y lo bien que se esta sin trabajar, se mezclan en un coctel un poco agridulce. Todos los sentimientos , de lo vivido , visto y sentido, junto a la sensación tan excitante de viajar y sentirse tan vivo por el mundo, hacen que estés en un sí, pero no , pero yo que se…. ahora te digo si vuelvo o no….. queeeeee………seguro que me entiendes….

Pues seguimos rumbo al punto de partida, Sagunto. Y cómo empezó esta historia pues va acabando. Llegada al mimos hotel y en la puerta, debajo de una arboleda hicimos nuestro ultimo picnic. Tremendo cómo aguantó el tipo este compañero de viaje, » el picnic». Nos día de comer muchísimas veces, no se reservo nada para él. Siempre presto para dar su servicio, guardando aquello que tanto apreciábamos, el pan, el salchichón, el jamón, y otros embutidos, el agua, cerveza, y otros refrescos, la mesa, utensilios para comer….. las maletas ….. en fin se porto como debía, estuvo a la altura y no nos defraudó. Gracias furgoneta de apoyo.

Te llevaremos en el corazón. JAJAJA

Y antes de despedirme de esta redacción, que espero a mi lector le guste, he de agradecer a mi compañero y socio Andrés todo el trabajo que ha realizado durante el viaje, sin él no habría podido desarrollar tantas y tantas cosas como hemos acometido, 18 personas, 6000 kms, hoteles, restaurantes, necesidades de los participantes, inconvenientes, y tantas cosas que surgen, que sin un debido apoyo, seguro que no hubiera salido todo tan bien como resultó.

Y ahora en estas ultimas lineas hago un poco memoria del recorrido y es que ha sido TREMENDO. Sagunto, Perpinñan, Grenoble, Verbier, Davos, Salzburgo, Tirol central, Viena, Praga, Titisse, Lyon, Andorra, Sagunto y a casa. Bravo por todos los participantes porque habéis sido geniales. Y hemos tomado nota de los errores, que por supuesto también hemos cometido. Y estos nos sirven para mejorar. Por eso estamos preparando desde cero nuestra proxima gran aventura. Nordkapp. Al cual le hemos hecho un planteamiento nuevo, y con objetivos nuevos. Ahora nos vamos en septiembre para hacer una re invención del tipo de viaje, para que se adapte mejor a las necesidades de nuestros clientes, un viaje pleno, pero mas descansado, y pausado.

Hasta aquí os cuento. Lo próximo: ya mismo….

Y ahora sí, me despido y espero que os haya gustado esta aventura. Os dejo videos y me falta por pinchar el montaje final.

Hasta pronto…

Tito Céspedes